La lucha libre mexicana es un tipo de lucha libre que se practica en México. Las principales diferencias con la lucha libre tradicional son las propias técnicas usadas, reglas y el folklore mexicano, característica muy visible y diferenciadora respecto a la de otro paises.
Sus inicios se remontan a mediados del Siglo XIX, cuando Enrique Ugartetxea, el primer luchador mexicano, desarrolló esta técnica basándose en la lucha grecorromana. Sin embargo no sería hasta la década de 1950 cuando emergieron El Santo, Blue Demon y Mil máscaras, considerados leyenda hoy en día.
La mayoría de los luchadores portan máscaras que ocultan su identidad y les da una personalidad especial. Es habitual jugarse la máscara en combate contra otro luchador; si el oponente también porta su máscara se trataría de un máscara contra máscara, en cambio si el contrincante no es un enmascarado, hablaríamos de un máscara contra cabellera. Si un luchador pierde tras haber apostado su máscara, éste no podrá volver a llevarla nunca durante su carrera deportiva, aunque se han dado casos de luchadores que perdieron y siguieron usando su máscara.
La lucha libre está muy arraigada en la cultura popular mexicana, considerándose más que un simple deporte. Es parte del folklore de México, una modalidad de lucha que se vive con mucha pasión y alegría y que ha dejado combates tan míticos como los que enfrentaron a Blue Demon y El Santo entre 1952 y 1953. Su rivalidad y popularidad fueron tales, que ambos luchadores acabaron protagonizando más de diez películas juntos, convirtiéndose en iconos de la cultura popular de por vida .