Hay 3 puntos importantes en la construcción de todo calzado y botas de seguridad:
Suela: Es la parte que conecta con la tierra, por lo que es de suma importancia que esté hecha de un material resistente pero a la vez, cómodo y duradero. Existen varios tipos de suela, las hay de poliuretano, hule, cuero, EVA, bambú, nylon, madera… Dependiendo del uso que se le vaya a dar a la bota, o del clima en el que ésta se vaya a utilizar, es aconsejable escoger un tipo de suela u otra.
Por ejemplo en construcción y climas húmedos el poliuretano no sirve, ya que la humedad hace que las filtraciones en el material no se sequen y las suelas acaben pudriéndose.
Para Panamá por ejemplo recomendamos las suelas de hule. Si tenemos en cuenta el clima del país, este material es el más duradero y resistente.
Es por eso que marcas como Timberland utilizan este tipo de suelas.
Piel: El material principal de la bota. Puede ser sintética (cuerina y derivados) o cuero. Los factores importantes a tener en cuenta en este caso, son la impermeabilidad, la durabilidad y la transpirabilidad.
Por ejemplo una bota de cuerina en un clima húmedo no funcionará tan bien como una de cuero, puesto que la cuerina al ser gran parte plástica, no permite que la piel transpire y tiende a pelarse con el tiempo.
Recomendamos el uso de una piel natural de vacuno. A medio y largo plazo es su mejor inversión. Le dará más resistencia y más suavidad que cualquier otro tipo de sintético de “action leather” (no es leather / cuero). Además, el cuero es un repelente natural al agua. Si está buscando un producto que le aguante cualquier tipo de clima, esta es su mejor opción.
Piezas de cuero vacuno en una tendería tradicional mexicana.
Construcción: Existen distintos tipos de construcción a la hora de fabricar una buena bota de seguridad:
Vulcanizado, GoodYear Welt, Supersole, lockstitch… Resumiendo, hay dos grandes grupos: Botas de seguridad pegadas y botas de seguridad cosidas. Cada construcción tiene sus ventajas y desventajas. Por ejemplo el vulcanizado (pegado) es muy ligero pero depende mucho de la marca y de la calidad del pegamento. Muchas botas de marcas chinas llegan a despegarse muy rápidamente con el tiempo. En el caso del GoodYear Welt (cosido), es un poco más pesado pero mucho más duradero y da la opción de reemplazar la suela una vez que ésta se haya acabado.”